La PolicÃa Bonaerense reprimió este jueves a los trabajadores de Pepsico para desalojar la planta de Vicente López que la multinacional cerró el mes pasado y que habÃan ocupado en reclamo de la reincorporación de 600 despedidos.
El desalojo se concretó a las 8 de la mañana, después de casi 48 horas de tensión por la decisión del fiscal Gastón Larramendi y la jueza Andrea RodrÃguez Mentasty de desalojar la planta, lo que en principio se iba a realizar en la madrugada del miércoles pero los trabajadores junto a militantes de partidos de izquierda montaron una vigilia para evitarlo.
Los movimientos comenzaron alrededor de las 5 de la mañana, cuando la Bonaerense -respaldada por la GendarmerÃa- reforzó el operativo y rodeó la planta ubicada en la localidad de Florida. Tres horas después avanzaron contra el campamento que los trabajadores habÃan armado en la vereda y lo desalojaron.
En principio se estimaba que al menos 10 personas habÃan sido detenidas, aunque la tensión continuaba porque un grupo de entre 20 y 30 trabajadores permanecÃa en el techo de la planta, y desde donde arrojaron algunos elementos contundentes a la policÃa.
La tensión en el techo de la planta se extendió casi dos horas, ya que los efectivos recién pudieron acceder a las instalaciones media hora después de desalojar la vereda y tardaron otro tanto en llegar al techo. Una vez allÃ, tres trabajadores se pararon en la cornisa para impedir ser desalojados.
La negociación se destrabó luego de que la PolicÃa aceptó que un grupo de abogados y dirigentes polÃticos llegara hasta el techo de la planta y acompañara a salir los ocupantes que quedaban en la planta, para evitar ser reprimidos.
Mientras tanto, en los alrededores la Bonaerense montó un enorme operativo y hasta impidió a los medios de comunicación acercarse a la planta para que no muestren las imágenes del final del desalojo. Esto provocó incidentes y la policÃa terminó golpeando a algunos trabajadores de prensa.
El 20 de junio pasado los trabajadores fueron notificados con un comunicado en el portón de acceso a la planta sobre su cierre y el traslado de la producción a otra fábrica que la empresa posee en Mar del Plata.
Los delegados sindicales denunciaron que desde que se concretó el cierre "ni un trabajador fue trasladado" y que la producción que se realizaba en Florida comenzó a ser importada desde Chile, por lo que reclaman la reapertura de la planta. "En realidad no hay ninguna crisis, sino un vaciamiento donde ya además están importando desde Chile los productos que fabricábamos acá", denunció el delegado Camilo Montes.
Pepsico es presidida actualmente por Marcelo Bombau, ex CEO de Torneos y Competencias, que se hizo famoso por defender la televisación privatizada del fútbol cuando el kirchnerismo le quitó los derechos.
Por otro lado, el que salió a defenderse fue el secretario general del gremio de la Alimentación (STIA), Rodolfo Daer, cuestionado por la comisión interna de Pepsico. "Mientras habÃa consumo, las plantas de Mar del Plata y Florida funcionaban a full. Cuando cae, en los últimos dos años, es cuando sucede el cierre del establecimiento y se quedan con la más nueva", explicó el sindicalista, que agotaron "todas las instancias" para sostener los puestos de trabajo.
Los trabajadores de Pepsico estuvieron acompañados por un grupo de dirigentes de izquierda, algunos de los cuales sufrieron los efectos de la represión, como el candidato a diputado nacional Nicolás del Caño. "Esta situación no se aguanta más. Llegaron y avanzaron brutalmente, vinieron a los palazos, con el gas pimienta directo a los ojos de los trabajadores", afirmó el dirigente del PTS.
Massa El lÃder del FR aseguró que "el Gobierno se pone siempre del lado de la rentabilidad de las empresas y se desentiende de los problemas de los trabajadores". "Macri no termina de entender que el rol del Estado es arbitrar en la relación desigual de empresarios y trabajadores. Claramente actúa como un empresario", criticó.
Myriam Bregman, otra de las presentes, apuntó contra el gobierno por la represión. "Les molesta que el paÃs se entere que el Presidente y la Gobernadora son represores. Se les cayó la careta. Este es el diálogo de Macri y Vidal", disparó la precandidata a diputada porteña por el FIT.
"Estamos acá apoyando a los laburantes despedidos y somos testigos de la brutal represión comandada por la gobernadora Vidal y el presidente Macri", afirmó por su parte, el diputado nacional Leonardo Grosso (Movimiento Evita). "La polÃtica económica de ajuste la quieren implementar a fuerza de palos y balas de goma, sin importarles que haya mujeres", agregó.
En las afueras de la fábrica se encontraban esta mañana, Luis Zamora (Autodeterminación y Libertad), Christian Castillo (PTS), Vilma Ripoll (MST) y Claudio Dellecarbonara (metrodelegados), entre otros dirigentes.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
No voy a defender a los hijos de puta de Pepsi Cola ni al gobierno, que hoy reprime por esto y mañana le va a aplicar la Taser a la abuelita de cualquier vecino, pero tampoco lo voy a hacer con este epifenómeno de la pequeñoburguesía que se llama "izquierda", que plantea una revolución imaginaria (y donde no lo fue causó millones de muertos al pedo) y que es completamente funcional al régimen.
Digo esto porque los conozco bien, porque sé que son tan gorilas como las señoras gordas de la Recoleta y porque he participado en tomas donde esta gente es la primera en levantar la mano para aprobar las medidas más extremas pero después se borran y son otros los que tienen que bancarse lo que viene. No me extrañaría que de los 69 que tomaron la planta, sólo unos pocos eran los comisarios políticos de estos "dirigentes de los trabajadores" y el resto personas de buena fe.
La "izquierda" quiere un muerto y el gobierno pedorro que tenemos le va a dar ese gusto, tarde o temprano. Y el muerto no va a ser Pitrola, ni Myriam Bregman ni la enfermera Vilma Ripoll, sino un trabajador que creyó en sus disparates.
El verdadero enemigo es Macri. ¿Por qué no le hacen una manifestación en la quinta de Olivos o en la Plaza de Mayo? ¿O siempre esconden el bulto dentro de la masa peronista para después llevarse los laureles de revolucionarios?
Y... Johnny English, tenés suerte de escudarte en el anonimato, pendejo. En los 60 y 70 tendrías que haber dicho eso personalmente, y te hubieran pegado un cuetazo.
Acá no hubo ninguna represión, solamente se está desalojando una propiedad privada tomada por gente que no tienen ningún derecho legal sobre dicho inmueble ni sus instalaciones.
Después se quejan que las empresas no invierten ni abren plantas en el país, con antecedentes como estos no se que pretenden.
Argentina es un país inviable hace décadas..